Prometeo (Manuel Vicent)

Publicado este domingo en El País:

Cada día hay más distancia entre los que saben mucho y los que saben poco, entre los que lo pueden todo y los que no pueden nada. Cada día son más los que obedecen ciegamente a unos pocos y es más profundo el vacío entre esos seres innombrables que ostentan el poder sin límite sobre nuestras vidas y la sociedad invertebrada que se mueve abajo como un ganado lanar. No obstante, existen unas reglas precisas para que la gente obedezca sin rebelarse, creyéndose libre. Ante todo hay que tener al público contento y culpabilizado, sin darle tiempo a pensar. En cualquier caso, será necesario agitarlo con un látigo para que baile y se divierta ante una hipotética catástrofe que se avecina. Se le azotará alegremente con espectáculos de masas, con la basura de la televisión, con un sexo imposible al alcance de la mano, con ídolos del deporte, que sobre los vertederos industriales de las ciudades erigirán unos cuerpos desnudos en las vallas publicitarias como productos deseados, pero en medio del sonido que desprende una fiesta semejante se deberá oír una voz potente que anuncie medidas dolorosas, necesarias e inevitables para salir de la crisis sin que se nos permita dejar de bailar. La voz repetirá una y otra vez que todo ha sucedido por nuestra culpa. Queríamos tener dos casas, un coche de gran cilindrada, ir de vacaciones de verano a Cancún o a esquiar a los Alpes, y no cesamos de consumir sin freno, de exigir trabajar menos y cobrar más. Protegidos por el vocabulario críptico de la alta tecnología, por el jeroglífico indescifrable de las leyes religiosas del mercado, el sistema hará que te sientas un menor de edad, ignorante y cómodo en medio de la mediocridad general, te hará correr agónicamente hacia el pesebre repleto de alfalfa y cuando te tenga del todo en sus manos te enseñará a balar. Pero recientemente ha surgido un nuevo Prometeo que ha vuelto a robar el fuego del Olimpo. El héroe mitológico se ha encarnado en Julian Assange, el creador de Wikileaks, al que han encadenado para dejarlo a merced de las alimañas. Ha sido el primero, pero pronto tendrá una legión de seguidores dispuestos a apropiarse de la alta tecnología informática, como del fuego sagrado, y entonces serán los corderos los que desafíen y suplanten a los dioses.

 Hasta hace pocos días lo hubiera suscrito punto por punto pero ahora me pregunto cómo saldrán los corderos  de su ostracismo ¿a la plancha o al horno? Empiezo a dudar que haya nadie capaz de levantar la enorme losa con la que la mayoría de la sociedad carga a quien intenta cualquier movimiento crítico con una situación que se hace por días más insoportable.

13 comentarios

  1. Albert

     /  13 diciembre 2010

    Poco a poco los corderos nos vamos dando cuenta de que desde abajo no se puede luchar contra el poder al igual que una hormiga no puede luchar contra la bota que la aplasta. Los franceses y los griegos llevan ya innumerables huelgas generales pero no han conseguido ni paralizar la reforma de las pensiones ni los planes de recortes, aparte del derecho al pataleo.
    La única posibilidad, a mi juicio, es que los ciudadanos voten todos a un partido político/sindicato fuerte que pueda llegar al poder y cambiar las cosas, como los gobiernos bolivarianos en Latinoamérica o como los gobiernos progresistas de la II República Española. Y eso, a la vista de la globalización, siendo muy optimista…

  2. No saldrán del ostracismo ni al horno ni a la plancha. Saldrán triscando muy contentos con unas nuevas mandíbulas de acero, obsequio de los de arriba para que den buena cuenta de Prometeo, y quizá de Vicent también.

  3. Chapó….!!

  4. eliecer

     /  13 diciembre 2010

    Centrando la atención en las cosas que verdaderamente son importantes, disipando las cortinas de humo y la manipulación incensante a la que nos someten, amén de nuestra propia indolencia. Lo que haces tu en tu blog. Yo confio en ti.

  5. eliecer

     /  13 diciembre 2010

    Hay que tener en cuenta que el borreguismo vende, y que lo que sale en prensa no representa la totalidad de la realidad, todos los grandes cambios y conquistas sociales se han producido desde abajo hacia arriba, no hay que esperar mucho de los dirigentes. Ahora claro contra la desesperanza y el sentimiento de derrota no se puede hacer nada, es algo que fomentan conscientemente, «no se puede hacer nada», «son todos iguales», «la gente esta idiotizada», «esto ya no tiene remedio», me parece una manera bastante eficiente de neutralizar cualquier oposición a nuestros amos los mercados.
    Saludos.

  6. Rosa, creo que estamos analizando con herramientas propias de otras realidades. La batalla se perdió en los 70 en todo occidente, con ese mayo que empezó en 1965 y acabó en muchos sitios una década más tarde. La realidad hoy es otra. La clave está en pensar que lo que antaño fue control, control de los demás, hoy ya no es control, sagrada transición (¡en todo occidente!). Hoy se trata de hegemonía y está en todas partes… y en todos.

    Por mucho que Prometeo robe el fuego a los dioses, por mucho WikiLeaks que aparezca, éste será digerido, engullido, ajeno, como espectáculo y nada más que espectáculo. Ese fuego no puede prender nada, porque «d’on no n’hi ha no en raja». Para acabar con la hegemonía hay que trabajar desde abajo, creando otras prácticas, otras dinámicas y, en definitiva, otras realidades (y no otras percepciones, que parece que es siempre en lo que nos centramos).

    Yo también pienso como tú, que muchos corderos van a salir, vamos a salir a la plancha o asados. Y va a doler, y va a ser muy triste. Pero hay semillas y se está plantando. Lo que nos trae WikiLeaks no es una razón, un motivo, una revelación como las de antaño. Y sin embargo es parte fundamental del cambio, que tardará en llegar, pero habrá que seguir ahí, dándolo todo, para que llegue cuanto antes.

    Es hegemonía y no es control contra lo que nos enfrentamos. Y contra la hegemonía, más que reacción, que también, trabajo, trabajo, convicción y trabajo.

    (es mi lectura particular de lo que está ocurriendo y del dónde estamos… pero a veces tampoco lo tengo claro)

  7. Gloria

     /  14 diciembre 2010

    Más que nunca … resistencia. No estás sola.

  8. El paisano Manuel Vicent, escribe con pluma de Angel. En este artículo que nos ofreces estimada Rosa, me ha venido a la mente un excelente libró que publicó hace una década, que llevaba por título «La muerte bebe en vaso largo».

    La utópica Sociedad Cívica que tantas veces reclamo, anda despistada y sedada. Sus ídolos son mas bien figurantes sobre escenarios,en donde la parafernalia es mas importante que el Arte que dicen mostrarnos. Han hecho de la vida un espectáculo contínuo, en donde todos balan al compás de lo que les «cantan». Su existencia consiste en pasar por esta breve vida, siendo sombras de sombras, sin esforzarse para llegar a identificarse ni a si mismos.

    Existe mucha información, demasiada; pero hoy no se disfruta con ella para aprender…se consume.

    Prefiero quedarme con el «Son de mar» de Manuel Vicent. Por lo menos, consigo adormecerme entre el sonido de sus olas y/o dejando que su viento con olor a yodo, embriague mis sentidos.

  9. Duro, pesimista, deprimente… pero real. Salgamos de la gran mentira en la que nos tienen confinados. Contemos las verdades, hagamos que otros las entiendan y compartan. Si todos actuamos sin temer las consecuencias, no podrán pisotearnos a todos a la vez. Levantemos la cabeza para mirar bien directo a los poderosos y contarles que el cuento se acabó, el pastel ya se lo han comido…
    AHORA NOS TOCA COMER A NOSOTROS.
    La verdad nos hará libres.
    Saludos.

  10. zana

     /  14 diciembre 2010

    Hola personas,
    Os exprimiremos hasta la saciedad y luego os llenaremos con NUESTRA propia esencia (1984, George Orwell), así es como saldrán, saldremos, las ovejas, llenos de SU esencia…
    …Felices, amando nuestra esclavitud, deseando participar del Estado Totalitario «donde los jefes políticos todopoderosos y su ejército de colaboradores puedan gobernar una población de esclavos sobre los cuales no sea necesario ejercer coerción alguna por cuanto amarán su servidumbre». Esto es Huxley (Un mundo feliz).

    Y para poner algo propio, y adecuado al tema y a los comentarios.
    …Veo mucho pesimismo y eso es, entre comillas, bueno, pues sólo las personas que buscan el bien general, y luchan por conseguirlo, tienen el derecho a ser pesimistas. O dicho de otra manera; a los conservadores les sonríe la cosa, les va bien y no quieren cambios.
    Salud, república y + escuelas públicas

  11. Trancos

     /  15 diciembre 2010

    Zeus se vengó también de Prometeo e hizo que le llevaran al Cáucaso, donde fue encadenado por Hefesto con la ayuda de Bía y Cratos. Zeus envió un águila (hija de los monstruos Tifón y Equidna) para que se comiera el hígado de Prometeo. Siendo éste inmortal, su hígado volvía a crecerle cada noche, y el águila volvía a comérselo cada día. Este castigo había de durar para siempre, pero Heracles pasó por el lugar de cautiverio de Prometeo de camino al jardín de las Hespérides y le liberó disparando una flecha al águila. Esta vez no le importó a Zeus que Prometeo evitase de nuevo su castigo, al proporcionar la liberación más gloria a Heracles, quien era hijo de Zeus. Prometeo fue así liberado, aunque debía llevar con él un anillo unido a un trozo de la roca a la que fue encadenado (Wikipedia)

    ¡Curioso! Prometeo con bola de presidiario… o pulsera de localización. El fuego de los dioses debía venir en un mechero de oro y de diseño.

  12. zana

     /  15 diciembre 2010

    Es curioso el tipo de «algunos» visitantes de este blog. En principio se supone que «antisistema» en el buen sentido de la palabra. Pero algo raro debe haber cuando votan dos negativos a Orwell y a Huxley. Curioso, si, muy curioso.